Recientes estudios señalan que la obstrucción crónica al flujo aéreo puede aparecer en edades tempranas, cuestionando la concepción tradicional de que la epoc es una enfermedad autoinfligida de los fumadores entre la 6ª y la 7ª década de la vida.

Hasta ahora se ha prestado poca atención a la repercusión en la edad adulta de los eventos que suceden en la infancia, como las bronquiolitis víricas, la displasia broncopulmonar o el tabaquismo materno, en cuanto a considerarlos como factores de riesgo de desarrollar epoc. Personas expuestas en su infancia a esas agresiones puede que no alcancen un desarrollo normal de su función pulmonar, presentando mayor riesgo de desarrollar EPOC y hacerlo más precozmente. En estos casos o en otros (como (ex)fumadores con síntomas de EPOC pero sin obstrucción en la espirometría), quizás fuese necesario un estudio más exhaustivo o un cribado de EPOC más precoz.

Por lo tanto, ¿Llegamos tarde al diagnóstico de la epoc? ¿Tiene sentido detectar precozmente a estos individuos más jóvenes? ¿Qué podríamos hacer por estos sujetos que desarrollan epoc a una edad más temprana?

En la editorial del décimo número de la revista en actualidad respiratoria A Todo Pulmón, el Dr. Francisco de Borja García-Cosío Piqueras, jefe de sección en Neumología en el Hospital Universitario Son Espases de Palma de Mallorca, resolverá todas estas incógnitas.